El grupo californiano nos presenta su nuevo disco: «What Chaos Is Imaginary»
¿Quién no ha soñado nunca con volver a su juventud? ¿Con vivir de nuevo las alegrías, euforias e incluso los sinsabores más amargos de esa época donde cualquier tipo de responsabilidad queda siempre bajo el control de lo emocional? Con Girlpool podemos hacerlo.
Cleo Tucker y Harmony Tividad dejaron el listón muy alto con su album debut «Before The World Was Big». Unas voces todavía infantiles empastaban a la perfección creando melodías indies, frescas y pegadizas en unos casos (Before The World Was Big, Crowded Stranger) y más oscuras e inconformistas en otros (Dear Nora, I like That You Can See It).
Con su segundo larga duración «Powerplant» lograron subir ese listón un poco más, abriéndose un hueco en la escena del indie rock americano de par en par. La inclusión de batería y unos singles perfectamente elegidos como «1, 2, 3», «Powerplant» o «It Gets More Blue» hicieron que la expectación sobre su tercer album fuera tal que hasta Pitchfork lo incluyó como uno de los discos más esperados de 2019.
¿Lograrían por tercera vez consecutiva pasar la barra? Por desgracia, no.
¿Es entonces un mal disco? Para nada. El problema es que volver a construir un puzzle tan completo y casi perfecto como «Powerplant» o «Before The World Was Big» no era fácil empresa. Era necesario que todas las piezas encajaran a la perfección y en What Chaos Is Imaginary eso no ocurre.
Bien es cierto que hay cortes muy notables y bien definidos; temas realmente buenos como los que encontramos al principio, pero otros que no llegan a su nivel, restando puntos al conjunto global.
«Lucy´s» es una apertura maravillosa. Suena la voz de Cleo en solitario para ser arropada rápidamente por una guitarra algo distorsionada y una batería que marca contundentemente los tiempos. Poco después se le une la voz de Harmony, dando lugar a la mejor parte de la canción.
She waters the ground with gin, she pours me out
Onto the shadow of her home-state tree
She’s not ready to let it be
«Where You Sink» empieza tranquila, solo con la voz de Harmony y una guitarra limpia. A los pocos segundos todo se apaga. Entran bajo, batería y distorsión para arrastrarnos al fondo de un pesaroso mar de sentimientos, oprimiéndonos el pecho y finalizando con una frase marca de la casa Girlpool:
I wanna try to be a ribbon in a puzzle mind
Fate’s a pickpocket, puzzle mind
Tras «Where You Sink», una guitarra con un poco de Delay nos conduce al que posiblemente sea el mejor tema del álbum: «Hire», en el que Cleo habla de los cambios que ha experimentado su vida, sin dejar de lado la ironía y explotando al final:
I let it live like a payday of mine
I can’t let it be, I’m high scoring memory
Just a look at quiet history
Inclusión de cuerdas
«What Chaos Is Imaginary» es una apuesta de riesgo que Girlpool hace con el atrevimiento digno de la juventud, con la cabeza bien alta. Harmony va modulando su voz en un cuidado falsete, juega con ella, llevándola por estrofas hasta el estribillo, mecida por un teclado y unas bonitas cuerdas, que se quedan finalmente solas aumentando la epicidad del tema durante casi un minuto.
«Roses» es sin lugar a dudas uno de los mejores cierres que un album puede tener. Una atmósfera creada a base de distorsión sobre la que bailan, una sobre la otra, las voces de Tucker y Tividad.
Come lay on top of me
Sin embargo…
El problema de «What Chaos Imaginary» son los altibajos que hay entre algunos cortes. Hay canciones que se pierden dentro de ellas mismas, en paisajes oscuros que no llegan a engancharnos («Chemical Freeze» o «Minute In Your Mind»), tratando de encontrar un equilibrio entre lo lírico y lo melódico.
Por Finch