El espía (The Spy)

critica-the-spy-el-espía-netflix-serie
The Spy – Netflix

El espía (The spy), fue estrenada por Netflix el 6 de septiembre de 2019, postulándose como una de las mejores series de espionaje del año.

Esta miniserie de 6 capítulos, producción de una empresa de medios francesa, ha tenido críticas positivas, pero con bastantes excepciones. Nosotros, desde el principio la evaluamos con una nota más que alta, aunque incluiremos algún comentario sobre esto más abajo.

SINOPSIS

El espía nos cuenta una historia de espionaje protagonizada por un judío de procedencia askenazy que se siente discriminado por el entorno sefardita en el que se mueve. Como dato curioso, investigando un poco sobre el tema, cabe decir que los askenazi tienen ascendencia alemana y los sefardíes, española, de ahí que hasta en sus idiomas tienen notables diferencias.

Debido a su aspecto árabe (él es egipcio) y el color tostado de su piel, el Mosad lo elige para infiltrarlo en Siria. Así pues, el proceso de preparación para la infiltración, la propia infiltración y los avatares de su cometido de espía copan parte del desarrollo. Hasta aquí nada especial, como puede verse.

En la Red he leído más de un comentario diciendo que el argumento es “archiconocido” y “anodino”. No estoy de acuerdo. Todos los argumentos pueden reducirse a un comentario muy general. Simplificando mucho, todos los argumentos se refieren a seres humanos en problemas. ¿Los hace eso archiconocidos o anodinos? ¿Qué diríamos de las películas de secuestros? ¿Y de los asesinos en serie? ¿Diríamos que todas son iguales? ¿Son iguales “Ciudadano X” que “El silencio de los corderos”? Pues, claramente, no.

Sinceramente, no sé que más se le puede pedir a una historia que sigue unos patrones ya determinados. La exigencia del espectador tiene que basarse en que no le sorprendan con salidas de tono, trucos e invenciones de los guionistas. Yo, como espectadora de un producto así, lo que espero es que haya rigor en el proceso de contar la historia, lógica implacable y sobre todo que sea verosímil, que no manipulen.

LINEA ARGUMENTAL

La serie está inspirada en un hecho real, el del espía Eli Cohen (brillantemente interpretado por Sacha Baron Cohen, dicho sea de paso), que bajo el nombre de Kamel Amin Thaabeth, accedió a puestos de privilegio en la sociedad siria previa a la guerra de los seis días de 1967 (Israel-Egipto).

criticas-de-series-2020-sacha-baron-cohen
Sacha Baron Cohen en The Spy (El espía)

El hecho de que haya un trasfondo histórico nos ayuda a creer en algunos detalles sorprendentes que de otra manera diríamos que podrían pertenecer a la imaginación del creador/director. Por ejemplo: llama la atención el sacrificio que se le exige al protagonista para dejar a un lado su vida familiar ante su compromiso con el Estado de Israel. Sin embargo, parece que fue así en la realidad. Cuando uno acepta ciertos desafíos, el río se desborda.

El proceso de “preparación” del espía no es especialmente interesante y el director pasa un poco de puntillas, quizá porque hay ya muchas películas que han tratado muy bien ese tema. Así pues, la acción va directa al grano y se centra en la separación familiar y el rodeo que se da a través de Argentina para dotar al protagonista de una nueva identidad.

En algunas webs inglesas de crítica de audiovisuales se han reprochado algunos lapsus en cuanto a la realidad histórica del argumento, pero, en mi opinión, no dejan de ser aspectos anecdóticos; como que el presidente de Siria nunca se encontró con el espía Cohen en Argentina. Bueno, ¿y qué? Hay que tener en cuenta que la serie ha pasado por dos tamices que siempre distorsionan; el primero, que estamos ante una versión de unos hechos ya novelados (la novela se titula “El espía que vino de Israel” escrito por los israelíes Uri Dan y Yeshayahu Ben Porat). El segundo, la elaboración del  guión para su rodaje.

Rodada con suficientes medios, en El espía abundan los exteriores, que ya es de agradecer, porque yo estoy harta de rodajes que van de despachos a alcobas y de alcobas a despachos, sin gastarse un euro. Muy bien los decorados y los interiores. Especialmente bien el vestuario. Una realización muy eficaz, con la cámara siempre al servicio del espectador. Gideon Raff, el director y creador de la serie, bien.

La actuación de los actores es en todo momento correcta, aunque no es el aspecto que me parece más sobresaliente.

Absolutamente recomendable a los amantes del thriller/espionaje

MOMENTOS ESTELARES

El espía cuenta con un montaje final bastante impactante, cuando se mezclan la historia verdadera con las secuencias filmadas. No voy a desvelar el contenido, pero son bastante fuertes. Es el cierre de la miniserie y es el momento en que pasamos de la ficción a la dura realidad y nos damos cuenta de que lo que se nos ha estado contando de manera escénica, tiene el soporte de lo que verdad ocurrió.

En cuanto a lo que son méritos de la producción en sí, yo destacaría el papel del espía, el protagonista, Sacha Baron Cohen y de su mujer Hadar Ratzon. Pero añadiría alguien más: un secundario a quien se le encomienda un papel especialmente difícil que desempeña con mucha calidad y que no veo mencionado en mis rastreos por la Red. Se trata del actor Nassim Si Ahmed que hace de Maazi Zaher Ma’az, sobrino del general Ad Din.

Tiene que actuar primero en el papel de un personaje singular: un joven teniente de buena familia protegido por los políticos, pero que es un vividor, borrachuzo, y que está descontento con su situación. Luego, las tornas cambian y debe interpretar otro papel muy distinto, no diré cual.

Los demás actores cumplen bien. Cada vez me asombro más de la cantidad de actores secundarios que bordan su papel. Solo basta recordar en Breaking Bad a Giancarlo Esposito (Gustavo «Gus» Fring) y a Raymond Cruz (Tuco Salamanca).

Por eso quiero destacar a este joven actor francés.

La ambientación de ciudad árabe en Damasco, que creo que se hizo en Marruecos, mejor que la de Buenos Aires. Está última tiene algún buen detalle de interiores y un bonito pasaje cuando Cohen toma el tranvía. No sé si el encuadre será porteño, pero huele mucho a genuino.

Y lo mejor de todo, a mi entender: las meteduras de pata del espía en cuestión, o su excesiva falta de prudencia, porque hacen más creíble la historia. En la ficción los espías no suelen cometer esos errores.

Anotar por tanto un error de principiante en el  episodio 2, en Buenos Aires. A esta  excesiva osadía, que no está de acuerdo con la peligrosidad de la situación, se añade un memorable error del Mosad (Episodio 5), que no desvelaremos aquí, pero que, por flagrante, nos induce a pensar que hubo de ser verídico. Tampoco pasa nada si es ficticio, porque, como dicen los italianos, “si non e vero e ben trovato”.

analisis-el espía-televisión
The Spy (El espía) – Imagen Netflix

MOMENTOS MEJORABLES

Hay, en mi opinión, un innecesario flashback hacia el final de la historia, que nada añade y confunde un poco. Además hace autospoiler. Menos mal que dura poco y que el montador no lo repite.

El matiz político es bastante evidente y los sirios no quedan, la verdad, en el mejor lugar. Corruptos y vividores, se dejan engatusar con alguna facilidad. No queda claro cómo Eli Cohen consolida su versión de alto empresario en la sociedad siria sin tener un pasado demostrable. Tampoco tenía conocimientos de hombre de negocios y tampoco tiene en Damasco ejecutivos a su cargo.

¿Cómo le ayudaron a fingir ese papel? Da la impresión de que esa parte ha sido omitida para centrarse en el tema del espionaje, pero nos han birlado un tema que tenía interés. Una vida de empresario internacional totalmente falsa tiene que estar llena de agujeros. ¿O no? Si no fuera porque la historia está basada en la realidad, esto me hubiera hecho sospechar que el guionista era un poco friki 😛

A pesar de estas pegas yo, que soy exigente en las películas de acción/espionaje, le daría a El espía de Netflix un 8,5 sobre 10, porque si el espectador busca una película de espionaje entretenida, bien desarrollada, ambientada, que entretenga y te lleve de la mano, ahí la tiene. Y esto no es muy corriente, porque hay un buen número de películas de este estilo que son unos auténticos pestiños.

Ahora bien, si alguien busca un producto nuevo que se aparte de lo tradicional, pues posiblemente ponga más reparos.

Kassandra.

FICHA TÉCNICA:

Título original: The Spy (el espía)
Miniserie de 6 capítulos (entre 50 minutos y una hora cada uno).
Año: 2019
País: Estados Unidos
Dirección: Gideon Raff
Guion: Gideon Raff y Max Perry (autor del libro que da origen a la serie)
Música: Guillaume Roussel, Evgueni Galperine, Sacha Galperine
Fotografía: Itai Ne’eman
Reparto:
Sacha Baron Cohen : Eli Cohen / Kamel Amin Thaabet
Hadar Ratzon-Rotem : Nadia Cohen, La espeosa de Eli Cohen
Yael Editan : Maya
Noah Emmerich: Dan
Nassim Si Ahmed: Ma’azi Zaher al-Din, sobrino del General Ad Din
Moni Moshonov: Shimoni
Alona Tal: Julia Schneider
Mourad Zaoui: Benny
Uri Gavriel: sheikh Majid al-Ard
Tim Seyfi: Mohammed bin Laden (De la familia Saudí de Osama)
Productora: Légende Films / OCS / Agora Films. Distribuida por Netflix
Género: Serie de TV. Intriga. Espionaje.

El espía (The Spy)
PUNTUACIÓN:
8.5

2 comentarios en “El espía (The Spy)”

  1. Marchetti daniel

    hay una intención política muy evidente .los sirios son losmalos,sucios , feos y también los agresores de israel.a mi criterio el trasfondo histórico no es auténtico

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio