Chicago, la última novela de David Mamet, está ambientada en la década de los años 20 y utiliza como telón de fondo los enfrentamientos entre dos bandas rivales, los italianos de Capone y los irlandeses de O´Banion.
El novelista David Mamet nos ofrece, dentro de esa violencia diaria, una obra muy personal, porque, aunque desarrolla en un principio el tema de la Mafia, se queda solo ahí, en una breve pincelada. Ese es el escenario de una venganza. Mike, piloto de la fuerza aérea estadounidense, actualmente trabajando para un periódico de la ciudad, y su novia Annie, se encuentran en un hotel. La puerta se abre y alguien dispara a la chica. Muere. A partir de ahí Mike, acompañado por su amigo Parlow, no tiene más que un objetivo: encontrar al asesino. Todo lo anterior va pasando de una manera difuminada a lo largo de la narración
En enero de 1920 se promulgó en los Estados Unidos la Ley Seca, hecho que dio pie a una oleada de crimen y violencia por el control de la ciudad y el monopolio del alcohol, mientras se van consolidando los negocios del juego, prostitución y drogas y se perfeccionan “los status de protección”.
El argumento es anodino. Las idas y venidas del protagonista se enmarcan en unos diálogos confusos. El mensaje entre emisor y receptor es oscuro, lo que lleva aparejado que el código empleado en ese canal de comunicación Autor/Lector,sea difuso.
Lo sorprendente es que David Mamet nos ofrece con Chicago una novela más, sobre el mundo de Capone, que no dice ni aporta nada, y nos sorprende precisamente por ello, ya que está considerado como un respetado dramaturgo y un destacado ensayista, además de por tener en su haber importantes novelas y haber participado en guiones para obras de teatro. Caben por tanto dos preguntas, ¿por qué ha escrito este libro? y ¿qué buscaba?
La segunda respondería a la primera. ¿Por qué desde su última publicación, aparece años después con un relato menos interesante? Después de una segunda revisión de la obra entendemos que se desprende de ella una clara denuncia. Poder y corrupción. Tráfico de armas y sobre todo la connivencia de los gobiernos para pactar con quienes no deben. Engaños y juego a tres bandas. Traficantes, grupos armados y los diferentes gobiernos. Todos están involucrados, porque además, no pueden dejar de estarlo, sobre todo los gobiernos. Años de investigación para descubrir y conocer todos estos entresijos, que no tienen límite, y sobre todo, los diferentes canales de distribución.
Por Mr. Tom
Puntuación:
Chicago
Autor: David Mamet
Publicación: Febrero 2018
