La última traición es la sexta entrega de la saga “Inspectora Lottie Parker”. Desde aquel marzo de 2017 en que apareció la primera, “Los niños desaparecidos” , hasta hoy, han transcurrido tres años de éxito para Patricia Gibney, el cual le ha sido reconocido no sólo en su Irlanda natal, sino en todo el mundo.
Sus obras se caracterizan sobre todo porque pasan muchas cosas, demasiadas, como ya dijimos en la reseña de «No hay salida«, para una localidad tan pequeña como Ragmullin.
«La última traición» comienza con la puesta en libertad de Conor Dowling tras haber pasado diez años encerrado en prisión. A las pocas horas de haber llegado a Ragmullin, dos jóvenes, Amy Whyte y Penny Brogan, aparecen asesinadas. A partir de ese momento todo sucede muy rápido, de manera frenética, dejándo una ligera sensación de que la narración se va perdiendo.
La inspectora Lottie Parker, con demasiados problemas personales que prácticamente arrastra desde sus comienzos, se hace cargo de la investigación. Enseguida, ésta toma derroteros confusos que además la involucran a ella directamente. Demasiados acontecimientos se suceden sin descanso, hasta que la novela llega a un nudo extraño y tan rebuscado que hace que el interés se vaya difuminando, desdibujándose notablemente. Hay una sensación de pérdida de todo ese universo creado por Gibney desde la aparición de Lottie Parker.
No acaba de convencer todo lo que está sucediendo. El ritmo al que la autora somete al relato, presumiblemente para que nuestra atención no decaiga, nos sobrepasa. No hay explicación plausible a ciertos hechos. Hay algo pueril que va tomando forma y se apodera del relato. Gibney nos quiere transmitir tensión en grado sumo mediante una carrera desenfrenada para encontrar al asesino de las dos adolescentes en la que los protagonistas apenas duermen, comen muy poco, si es que lo hacen y no tienen tiempo ni siquiera de cambiarse de ropa.
En «La última traición», Patricia Gibney se esfuerza demasiado por mantener esta presión de un modo constante, incluso en aquellos espacios o partes del relato con menor carga dramática. Esto llega a provocar un agobio forzado, que quizás es lo que buscan muchos lectores, pero que no ha sido mi caso.
Lottie Parker es una mujer alterada por un pasado que conocemos por relatos anteriores y que realmente es muy dramático. Hay una evidente falta de equilibrio, es como si tuviese una distonía emocional. En la citada anteriormente “No hay salida”, encontramos un punto de inflexión en la saga. Ya dijimos de la inspectora que era una persona frágil, con reacciones no acordes con la gravedad de los hechos que se nos describen, lo que provoca la fragilidad del personaje. En la que nos ocupa, seguimos pensando lo mismo.
Conclusiones
Parece como si Patricia Gibney hubiera querido con “La última traición”, conseguir el culmen de toda su obra. Quiere sorprendernos sea como sea, atraparnos capítulo a capítulo. Para ello le insufla a la novela una rapidez extrema en el relato, sin pausa alguna, no importa tanto la forma, ni la otrora más cuidada perfección de sus personajes. Ese flujo constante y rápido en la sucesión de unos hechos, cuando menos poco explicables, hace que, en conjunto, la obra pierda fuerza, llegando el lector al final parcialmente despistado.
Pese a todo esto, que insisto en que no deja de ser una opinión personal, hay que reconocer que la obra entera de Patricia Gibney tiene un mérito incuestionable y un éxito rotundo. La autora ha colocado a la inspectora Parker, Boyd, Kirby y al resto del equipo en la primera línea de la novela negra actual. El mismo hecho de comenzar a escribir para superar la pérdida de su marido ya habla en su favor. Hace falta fuerza, tesón y perseverar en un “día a día” muy duro.
”La última Traición” es amena, a pesar de las lagunas comentadas, y gustará a quien le guste el género, a los incondicionales de la inspectora y, por supuesto, a quien quiera pasar un buen rato sin plantearse demasiadas exigencias.
Ficha técnica:
Título: La última traición.
Autor: Patricia Gibney.
Fecha publicación: 17 junio 2020.
Editorial: Principal de Libros.
