“La biblioteca de París”, segunda obra de la profesora, bibliotecaria y escritora Janet Skeslien Charles, es una novela ambientada en la capital francesa en los días previos a su ocupación por el ejercito alemán.
Aunque la novela se desarrolla en dos tiempos, 1939 y 1883, la fuerza narrativa del primero absorbe prácticamente al que se desarrolla más tarde en una ciudad del estado de Montana, en E.E.U.U. Ambos bloques están protagonizados por la misma persona: Odile Souchet.
ARGUMENTO DE LA BIBLIOTECA DE PARÍS
La vida de Odile, muy joven y apasionada de los libros, transcurre feliz cuando, a pesar de una leve oposición por parte de su padre, consigue su primer trabajo como empleada en la biblioteca americana de la capital parisina.
Muy pronto, con las primeras fuerzas de ocupación ya en la ciudad, todo a su alrededor comienza a cambiar y en pocos días los franceses se sienten refugiados en su propio país. Con el primer bombardeo comienza el éxodo de sus habitantes y París pasa a convertirse en una ciudad fantasma, una ciudad abierta, ni se defiende ni es atacada. Los controles aumentan cada día y, primero, el miedo, y, luego, el terror acaban doblegando a una población que intenta como puede mantenerse en pie sin perder el ánimo.
«La biblioteca de París» cuenta con grandes momentos en los que la autora sabe conectar y transmitir unos hechos en los que no faltaron actos de valor y sacrificio por parte de la población y lo mezcla con otros revestidos de romanticismo que ayudan a dar mayor cuerpo a la novela.
Janet Skeslien Charles hace especial hincapié en las detenciones indiscriminadas de judíos, como la ocurrida, aunque no se nombre directamente, los días 16 y 17 de julio de 1944 en la que 13.000 judíos fueron retenidos durante una semana en el Velódromo de invierno y posteriormente enviados al campo de internamiento de Drancy. De allí fueron deportados a otros campos de concentración, la mayoría a Auschwitz, para su exterminio. La autora se detiene igualmente en las miles de denuncias indiscriminadas, denuncias anónimas, muchas falsas, motivadas por el odio y que en la novela cobran especial relevancia.
Utilizando la Biblioteca Americana como fondo, Janet Skeslien Charles va desgranando la vida personal de sus empleados y de los libros como protagonistas, tan secundarios como importantes. Sobre todos ellos, la autora hace gravitar la acción.
Se va produciendo un acercamiento de Odile hacia el resto de sus compañeros y se esfuerza con ellos en evitar el saqueo que prevén se producirá, al igual que ha pasado en los demás centros culturales. El peligro une aún más a unas personas que tienen mucho que perder y que arriesgan sus vidas por una única razón, la libertad y acabar con el dolor y el sufrimiento que ven allá donde van.
Los lazos que unen a los empleados de la biblioteca, su amistad que aumenta día a día proporcionalmente al peligro que corren y sus esfuerzos por llevar adelante sus planes son lo que dan valor al relato y engrandece la novela.
“La biblioteca de París” se convierte en una reflexión sobre cómo las situaciones difíciles unen a las personas, y sobre la dificultad de tomar decisiones correctas cuando afrontamos momentos en los que no tenemos ningún control. Por el contrario, su influencia nos altera profundamente y nos empuja a cometer errores, tanto más graves cuanto mayor sea la relevancia que tienen los acontecimientos.
Por encima de un hermoso romanticismo puntual, el relato apunta al enaltecimiento de la amistad en tiempos difíciles, al valor de la defensa de los ideales que concede una fuerza de la que se creía carecer. «La biblioteca de París» es una novela que lleva implícito el consejo de que, al tener todos los actos consecuencias es conveniente analizar éstas previamente. Mensaje que Odile, ya mayor, le da a una niña mediante la metafórica expresión, “¡Piensa! He visto cuervos revoloteando sobre tu cabeza”.
Ficha Técnica.
Título: La biblioteca de París.
Autor: Janet Skeslien Charles.
Fecha publicación: 15 abril 2021.
Editorial: Salamandra.
Traducción: Gemma Rovira.
Género: Thriller
