Londres 1940. Escuchas espías. En “La mecanógrafa” Kate Atkinson hace un retrato en blanco y negro de las escuchas efectuadas por el MI 5 a quintacolumnistas, simpatizantes del nazismo y La Liga de la Derecha, durante la segunda guerra mundial.
Novela, que por sus comentarios y explicaciones finales, la autora quería situarla como referencia del espionaje y contraespionaje llevado a cabo aquellos años, tanto por el servicio secreto británico como por los de los demás países. Quería, pero no lo consigue. «La mecanógrafa» se queda muy lejos de ese objetivo. Mal contada y mal desarrollada, no interesa en ningún momento.
Si la idea era buena, el guión sobre el que se mueve es infantil, a pesar de que los hechos en sí mismos daban para mucho, pero en la pluma de Atkinson no encuentran ni el saber decirlo, ni el desarrollarlo.
Atkinson estructura la obra en dos etapas. La primera en 1940, cuando el servicio secreto inglés crea una red de escuchas para conocer los movimientos del enemigo y cuyo principal objetivo es pasar información falsa. Espías dobles e infiltrados van actuando en las sombras, débilmente protegidos y por tanto, con los miedos propios de no conocer con quien están tratando o si son utilizados.
Esta parte da lugar a una segunda que comienza en 1950. Reubicados todos los miembros de esta célula, ya con empleos estables, surgen, aunque en realidad nunca se olvidan, esos traumas del pasado, en los que, en beneficio de “asuntos más importantes”, se sacrifican intereses, y algo más, particulares.
Cuanto mayores fueron las desgracias acaecidas, mayores odios generaron. Supervivientes de uno y otro bando intentan, amparados en la oscuridad de la postguerra, acabar aquello que empezaron y no pudieron terminar. El odio hacia personas del entorno se exacerba y sobrevienen venganzas encubiertas.
Esta segunda parte no mejora la primera ni la empeora, porque pasa desapercibida, sencillamente por no pasar nada. En estos momentos no se comprende lo que la escritora neoyorkina quiso transmitir o contar porque no hay nada nuevo que suscite interés. Banal es la palabra. Tampoco se comprenden las críticas que acompañan al libro.
El final, desolador.
Por Mr. Tom
Puntuación:
La mecanógrafa.
Autor: Kate Atkinson.
Publicación.: Junio 2019.