El humo de Birkenau – Liana Millu

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Portada de «El humo de Birkeanu»

Liana Millu, italiana, fue deportada en 1944, desde Fossoli, igual que Primo Levi y en fechas que debieron ser parejas. Fueron a parar a Auschwitz 3, el complejo Monowitz Birkenau. Levi lo detalla. Millu, no lo hace, pero sí que menciona en «El humo de Birkenau» que para ir al trabajo en el Lager tenía que recorrer una significativa distancia, por lo que debía ser la misma construcción de Buna, la fabrica sintética que IG Farm estaba edificando y donde trabajó Levi.

También estuvo ahí Jean Améry. No deja de ser extraordinario que estos tres testimonios provengan de sobrevivientes que trabajaron en el mismo lugar y en las mismas fechas. En las obras de Levi, sin embargo, no hay referencia a Liana Millu. No se debieron conocer. Sin embargo, Levi y Améry convivieron incluso en el mismo barracón. Améry lo recuerda y lo relata. Levi siempre dijo que no recordaba a Amèry ni en su mismo barracón, ni siquiera en Buna.

«El humo de Birkenau» NO es uno de los libros más conocidos escritos por supervivientes, pero tiene un interés muy especial.

En primer lugar, porque es de de primera mano, es decir, una experiencia directa. En segundo lugar, porque todas las protagonistas y sus compañeras son mujeres. Eso nos da una versión del mundo femenino en el Lager. Pero lo más sorprendente de estos relatos es que dejan traslucir momentos de optimismo y alegría que no aparecen en otros autores. También, rasgos de solidaridad entre unos prisioneros condenados a un egoísmo exacerbado para poder sobrevivir.

En El humo de Birkenau, Millu compone un panorama claroscuro con pequeños rayos de sol que atraviesan la capa de nubes que se ciernen sobre el campo. No recuerdo en la bibliografía de Primo Levi, por poner un ejemplo, que a ninguno de los protagonistas se le escape una sonrisa, ni a ellos ni a sus compañeros. Liana Millu, sin embargo, incluye en sus relatos un punto de esperanza, algún detalle de amistad, momentos de humanidad y ,también, algunas risas y sonrisas.

Así que sorprende leer pequeños detalles esporádicamente dispersos, como en la página 73: “oíamos las voces alegres y las carcajadas de las muchachas de la cocina”. O en la página 88, cuando narra el milagroso nacimiento de un niño y la congregación de las reclusas ayudando en el parto. Y no son sólo los detalles, sino la propia manera de narrar, llena de dulzura, de comprensión y exenta de aristas.

En la página 101 un párrafo empieza así: “Habíamos llegado al mercado y empezamos a mirar para ver si encontrábamos alguna oportunidad”. Esta frase vale para cualquier mercado, pero llamar así al de Auschwitz, trueque de desperdicios y de miseria material y moral, es lo que llama la atención. Espléndido el párrafo que dedica en la página 13 del primer relato a la protagonista del mismo, Lily, cuando habla de “su aspecto cuidado y las cosas bonitas que llevaba puestas”.

Al advertir estos detalles alguien podría pensar que no se corresponden con la lúgubre rutina cuajada de permanentes sobresaltos en que se desarrollaba la vida en el Lager, pero el sustrato es exactamente el mismo. Es Liana Millu la que maneja una varita mágica para extraer todo aquello (lo poco que hubo) que pudiera considerarse humano y positivo. Y los detalles a los que se agarra son para el lector como tomar un sorbo de agua fresca en medio de tanta sequedad. Las pequeñas perlas intercaladas en el texto no atenúan el color negro del conjunto.

Así que, muy a su pesar probablemente, la esencia de El humo de Birkenau está cuajada de las mismas precisiones macabras de los otros supervivientes escritores. Todos coinciden en utilizar el slang intercalado del Lager. En este libro observamos las palabras bloksperre, verrukt, links und links, häftling, postem etc. (palabras rusas polacas españolas, hebreas, alemanas que formaron parte del lenguaje de los campos. Detallo a continuación una web que las incluye con bastante extensión: https://www.jewishgen.org/ForgottenCamps/General/LanguageEng.html

Aparte de este lenguaje especial del Lager, otros hechos sobre los que se construye la narración son también denominador común de sus compañeros: los procesos de selección, la brutalidad de los capos, y de las jefas de barracón (las stubowa), el frío, los recuentos, el calor, el agotamiento permanente, el hambre etc.

ESTRUCTURA DE LOS RELATOS

Millu elige un momento clave que sitúa al final de cada relato y hacia el que va convergiendo la acción. Hay que decir que los finales están basados en hechos reales, porque los conocemos de otros testimonios. Lo que hace Millu es tejer un contexto basado en su experiencia personal para llegar hasta una anécdota espeluznante. Construye el tejido para engarzar al desenlace. Así consigue dotar a los personajes de una historia, un contenido, una humanidad que nos los aproxima. De ese modo, la anécdota, fría e impersonal, se convierte en un drama humano que nos conmueve. Ya no hay protagonistas sin nombre, sino seres humanos que caminan hacia su desesperación final.

La factura literaria también es espléndida: Simplicidad, riqueza de detalles, perfecta construcción, uniforme desarrollo de la acción y el dibujo de los personajes. Una vez más la realidad es más rica que la fantasía.

VALOR TESTIMONIAL

Todos los relatos de «El humo de Birkenau» son excelentes. Liana Milu era periodista y escritora. De hecho, había publicado algún relato antes de la guerra. Auschwitz pone a su alcance todos los detalles y los argumentos para su escritura. Con ese material no hay posibilidad de síndrome del folio en blanco. Al revés, es un proceso de criba, de elección del tono, de calibración de la intensidad; y Liana Millu elige (como consta con acierto en la contraportada del libro) “la ausencia total de patetismo”. Ciertamente, no es total; guarda para el final de cada relato, en pocas líneas y con frases planas, la explosión de una espoleta retardada.

NOTA FINAL

En este año en que se cumplen 75 de la liberación de Auschwitz vamos a revisar en CRITICAS POLARES algunos de los títulos de la narrativa concentracionaria. Narrativa imprescindible para entender la historia dramática del siglo XX, una historia que a todos conviene tener presente para fabricar un futuro mejor.

Por Isidro M. Gimeno

Ficha técnica:

Titulo: El humo de Birkenau
Autora: Liana Millu
Editorial Acantilado
Primera edición Septiembre de 2005
Traducción Celia Filipetto

El humo de Birkenau – Liana Millu
PUNTUACIÓN:
8

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